Pez boca arriba: ¿Qué sucede y cómo solucionarlo?
La mayor parte de las anomalías de la salud de los peces de acuario se tienen la posibilidad de hacer un diagnostico por observación directa o, como bastante, con el apoyo de una lupa. Los cambios encontrados se tienen la posibilidad de dividir en tres clases:
Patología de la vejiga natatoria
En el momento en que ves un pez nadando boca abajo semeja que hace un número de comedia. No obstante, es que está enfermo. Esta patología se produce en la vejiga natatoria y pertence a las anomalías de la salud más frecuentes que están en los peces. Se puede hacer un diagnostico de manera fácil por el hecho de que los peces damnificados por esta patología empezarán a nadar boca abajo. El vientre se situará en la parte de arriba. El resultado de nadar de este modo frecuentemente es que proseguirá pegando todo cuanto se cruce en su sendero en tanto que no posee exactamente las mismas capacidades para nada ni exactamente el mismo equilibrio.
Causas genéticas
Una de las razones por las cuales los peces comienzan a nadar de lado e inclusive boca abajo es la genética. Los cruces consecutivos entre integrantes de exactamente la misma camada tienen la posibilidad de ocasionar una secuencia de inconvenientes, incluidos cambios en las membranas que cubren los sacos de la vejiga natatoria. En un caso así no hay cura ni solución viable.
Las infecciones son otra razón por la que los peces nadan de lado. Los virus, las bacterias o los parásitos intestinales asimismo tienen la posibilidad de perjudicar a la vejiga natatoria, tal como a otras zonas. Las opciones de supervivencia son pocas, pero en ciertos casos se puede cuidar de los peces a fin de que recobren la salud. Para esto, el veterinario debe saber la causa precisa y prescribir un régimen para el pez enfermo y para todo el acuario.
Presencia de parásitos gastrointestinales
Los peces tienen la posibilidad de padecer parásitos gastrointestinales (los mucho más usuales son del género Hexamita), lo que hace un cambio en sus hábitos de natación. En el momento en que experimenta este inconveniente, el pez retrae su aleta de natación, con lo que normalmente nadará de lado en el transcurso de un período temporal. Con el régimen conveniente, volverá a su estado habitual.
Un caso mucho más grave que el previo supone la existencia de una infección bacteriana. En un caso así, no solo se va a ver perjudicado el movimiento de nado del pez, sino su historia corre riesgo si no se actúa a tiempo. Si notas que el animal comienza a expandirse o a no comer, probablemente tenga este género de infección.
Parásitos
Hay parásitos externos y también internos que afectan la salud de los peces. Uno son las pulgas de agua, enanos crustáceos ovalados de color cobrizo que se adhieren a las aletas y se nutren de la sangre y los fluidos de los peces. Tienen la posibilidad de ocasionar la desaparición del animal, lo que provoca que se contraigan por contacto con otros peces damnificados por los parásitos. Como se tienen la posibilidad de ver a fácil vista, se retiran a mano, pero como los huevos son inapreciables, un régimen de acuario que dura seis meses, puesto que son muy resistentes. De forma alternativa, se tienen la posibilidad de ingresar piezas de cobre en el filtro para producir un óxido, que actúa como antiparasitario.
Asimismo está el verme ancla —Lernaea cyprinacea—, un crustáceo ectoparásito asiático, que se descubre a fácil vista y se habla de esta manera que el previo. Asimismo están los parásitos internos, ocasionados por la polución del agua o de los alimentos, que se enfrentan con antibióticos
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